Esta semana toca ser... Crítica2.0

¡Hola chicos!

¿Qué tal vuestras vacaciones de Semana Santa? Las mías muy ajetreadas jaja, ni tiempo me ha dado a escribiros una columna... 

Pero bueno, ya toca vuelta a la rutina, y como supongo que ya os habréis dado cuenta, esta semana me ha tocado ser crítica, por lo que he decidido que este golpe voy a daros a hablaros acerca de una desigualdad social que, a pesar del tiempo sigue estando muy presente en nuestro día a día.

La dificultad de oportunidades dependiendo dónde nazcas.

Nosotros, a lo mejor, que vivimos en España, un país que, dentro de lo que cabe, hay tecnologías, comida, economía, sanidad y educación públicas, no nos damos cuenta de estas diferencia, ya que está el derecho a estudiar y mayormente todos contamos con un techo y un plato de comida bajo este. 

Sin embargo, aún existe países en subdesarrollo, dónde las tecnologías apenas han llegado, no hay una economía tan completa, y que la educación o la sanidad tampoco es que estén en sus plenas facultades. Muchos no tienen ni techos ni platos, pero sobreviven gracias a continuas ayudas. 

Y la cuestión es; ¿sabiendo que el problema no es de hoy, no podríamos colaborar más para conseguir un mundo más equitativo en cuánto a derechos y oportunidades? ¿No es más sabio dejar atrás el egoísmo y darle la bienvenida a la empatía? ¿Colaborar todos juntos en vez de alejarnos? 

Hay gente que piensa que al igual que hay ricos deben de haber pobres, sin embargo; el hecho de que hayan diferencias económicas entre unos y otros no debería acarrear que por ello alguien no pueda estudiar la carrera de sus sueños, o que no pueda permitirse ir a un médico en condiciones. 

Personalmente creo que todos podemos poner un poquito de nuestra parte para que estas situaciones dejen de darse, no es muy difícil dar ayudas, pues no solo existen las económicas, cada uno puede poner su granito de arroz a su manera. 

Y bueno mis queridos lectores, espero que os haya gustado esta entrada, y que me deis vuestra opinión.

Os leoo!!💘💘💘💘💘